El día en que alguien apagó la tele
El viernes anterior a la entrada en vigor del decreto de confinamiento cogí el coche y corrí al centro comercial. Necesitaba una Nintendo Switch y el stock del hiper me indicó online que había dos allí. Al día siguiente cerraban todo salvo alimentación, tal vez por un mes -qué optimistas éramos-. No era el mejor precio, el mejor lugar, ni la mejor oferta. Pero era el cumpleaños de mi hijo.