ThePowerMBA está revolucionando un sector que estaba maduro para la disrupción. La experiencia de una escuela de negocios por dos ceros menos, con una experiencia de usuario rompedora, accediendo a una comunidad global de alumnos entusiasmados por el conocimiento de negocio.
¿Todo gracias a la tecnología? Muchas cosas sí, aunque no estemos ante una compañía eminentemente teckie. Los servicios cloud de diversas compañías nos permiten disponer nuestros contenidos en plataformas digitales al alcance de cualquier alumno. Y la escalabilidad de estos modelos, ofrecer un pricing que es una fracción del de otras escuelas de negocio. Sin entrar a hablar del marketing digital, de las plataformas que permiten gestionar comunidades globales de decenas de miles de alumnos, de bots para la atención automatizada, o de herramientas IA para doblaje automatizado de clases.
Pero la tecnología juega un papel mucho más profundo. El microlearning, la metodología formativa que está en el corazón de nuestra propuesta, es consecuencia directa de cómo nos relacionamos con el mundo a través de la tecnología. Nos hemos vuelto multitasking, saturando nuestros cerebros con bombardeos continuos de información. Retener hoy conceptos complejos pasa por este formato de microlearning, un aprendizaje enfocado en una modalidad amena y, si se me permite, algo gamberra.
La tecnología también nos está permitiendo comprender mejor nuestro entorno y el de nuestros alumnos. Sus inquietudes y, a través de ellas, las tendencias más relevantes que se imponen poco a poco en la empresa. Y hemos empezado a extraer inteligencia de esos datos, para pivotar nuestro modelo de negocio y volver a revolucionar otra industria: la formación en empresas.
¿Qué inteligencia estamos extrayendo? Hemos destacado de momento 10 grandes puntos o tendencias, que son un buen resumen de cómo la tecnología va a mover radicalmente nuestro sector en los próximos años.
- El reto de la verdadera transformación digital.
Cuando el inglés se volvió imprescindible para la internacionalización, ¿contratamos a filólogos ingleses como directivos?
En la era de la transformación digital, del dato, la clave sigue siendo el conocimiento de negocio. «Simplemente», para poder seguir en el mercado, necesitamos aprender el nuevo idioma, de la mano de expertos, incorporándolos a la empresa; pero, sobre todo, formando en skills técnicos a todos los perfiles de la compañía.
Este es uno de los retos más conocidos y más acuciantes, especialmente si fijamos la mirada en la pyme española y su gap de digitalización. Es fácil percibir este reto como inabordable, por eso en ThePowerMBA hemos decidido democratizar este conocimiento convirtiéndonos en un LaaS, Learning as a Service: por el precio de formar a unos pocos directivos, forma absolutamente a todos en los conocimientos y skills clave para la transformación digital.
- Del «one-company employee» a las 12 empresas por carrera.
La inestabilidad laboral no es una novedad. El 73% de nuestros alumnos no creen que vayan a estar en su compañía actual dentro de 5 años.
Existen diversos aceleradores de esta tendencia: la búsqueda de nuevos retos, la experiencia por encima de la estabilidad, y fundamentalmente la velocidad creciente de los cambios en prácticamente todas las industrias: automatización, concentración de empresas, etc.
Las empresas pueden reducir la rotación ofreciendo a los empleados una perspectiva de formación continua, y facilitando los skills para que puedan adoptar de forma ágil nuevos roles dentro de la misma empresa.
- La automatización como riesgo y como oportunidad.
Esto no va tanto de sustitución de empleos por la automatización, sino de sustitución de SKILLS. Dejará de tener sentido que un abogado revise en detalle un contrato, algoritmos de Lenguaje Natural lo harán mejor y en mucho menos tiempo. Dejando más tiempo a los abogados para realizar las actividades más creativas y menos automatizables.
Poder trabajar más tiempo en las tareas más humanas es una oportunidad antes que un riesgo, y así lo ven muchos de nuestros alumnos, que en muchos casos reconocen un valor añadido muy reducido en muchas de sus actividades cotidianas.
- Hybrid skills: los soft skills en los tiempos del algoritmo.
Se infiere de lo anterior una paradoja: nunca han sido más demandadas las soft skills, fundamentales en un entorno volátil y de incertidumbre, a la vez que se necesitan cada vez más habilidades y conocimientos técnicos.
Nuestros alumnos nos demandan a la vez más formación técnica y más soft skills. Itinerarios amplios y ricos en ambos tipos de skills son fundamentales para un crecimiento orgánico de cada profesional.
- Actualización y formación perenne: nadie se siente inmune al futuro.
La “T” del conocimiento profesional: un conocimiento superficial de bastantes cosas, y un conocimiento profundo de una sola. Ese es el tipo de esquema con el que muchos de nuestros alumnos se identifican: un consultor que tiene nociones de IA, Cloud, modelos de negocio, pero que lleva 10 años implantando SAP en distintas organizaciones.
El 94% de nuestros alumnos no sienten que tengan su trabajo garantizado a 10 años vista, y por tanto perciben que necesitan actualizarse continuamente: nunca la formación continua había sido un activo más valorado por los empleados.
La T del conocimiento profesional dejará paso por tanto a un bosque de conocimientos y habilidades que tendremos que aprender hasta un nivel experto a lo largo de nuestra carrera. O dicho de otro modo, no podremos ser ya más los especialistas de una sola habilidad o tecnología para siempre, tendremos que reinventarnos unas cuantas veces en nuestras carreras.
- Programas «francotiradores» vs generalistas.
Abarcar mucho suele significar no adquirir verdaderos conocimientos de nada. El formato de programas enfocados, de entre 20 y 100h, ha encajado en nuestros alumnos porque van al corazón de los conocimientos técnicos, soft skills, herramientas de negocio, etc. que verdaderamente pueden abarcar y aprender.
La metodología de clases de 15 min y enfocadas a un solo tema ayuda a nuestros alumnos a que los conocimientos calen mucho más que con los tradicionales programas generalistas, largos y con mucha “paja”.
- Formación puntual vs itinerarios formativos.
Cala la percepción de que la formación no debe acabar nunca. El 30% de nuestros alumnos del MBA han realizado un programa de enfoque similar en el pasado, y valora la actualización.
Ofrecerles un itinerario que se actualice constantemente es uno de los puntos que nos reclaman de continuo. Y una cualidad que la formación reglada no puede proveer con la misma agilidad.
- Upskilling funcional.
Trabajando con las principales compañías internacionales, una de las peticiones habituales es programas que ayuden a distintos perfiles internos a mejorar su desempeño: que las fuerzas comerciales vendan mejor, que los equipos técnicos adquieran más preparación en negocio, etc.
Para eso necesitamos ser capaces de personalizar y ampliar nuestros contenidos, ampliando el portfolio de programas a todo el espectro de necesidades reales y cambiantes de las empresas.
- Reskilling dentro de las compañías: ¿es posible?
Hemos hablado con muchas grandes compañías, también con muchas pequeñas, de cómo tienen que buscar fuera perfiles especialistas en datos, en IA, en ciberseguridad. Y muchos perfiles internos que ya tienen el 80% de los skills que se necesitarían para cubrir esas necesidades no se sabe cómo «resetearlos» para que cambien de función.
El reskilling es llevar el cambio de carrera profesional dentro de la propia empresa, dando la oportunidad a perfiles técnicos especialistas en una tecnología a actualizarse en las nuevas, minimizando fricciones de contratación y despidos al máximo.
Eso requiere de partners especialistas que acompañen a los departamentos de recursos humanos en el diseño de los itinerarios formativos específicos para cada empresa, un reto precioso que estamos asumiendo con mucha ilusión.
- La comunidad como ecosistema de aprendizaje.
La comunidad de conocimiento es nombrada como una de las ventajas más valoradas tras cursar un programa con TPMBA. En un contexto en el que la colaboración entre empresas es crucial, entrar en contacto con una red de miles de alumnos ha permitido que surgiesen colaboraciones entre pymes, iniciativas estratégicas entre varias empresas, etc.
También genera un foro ideal para la actualización en conocimientos y la discusión profunda sobre los conocimientos clave para el futuro.
Un nuevo modelo, la misma misión: transformar un sector.
No podemos pararnos. No queremos descansar, satisfechos por haber democratizado la formación de negocio en el B2C. Es hora de que esta transformación alcance a las compañías de todos los tamaños. Compañías para las que hasta ahora no había suficientes soluciones en el mercado: o una escuela de negocios para formar a unos pocos, o plataformas de contenidos para formar a todos, pero con escaso engagement y seguimiento por parte de los profesionales, que se sienten abrumados por el volumen de contenidos.
Nuestra propuesta es sencilla: transforma completamente tu empresa formando a TODOS, a través de itinerarios formativos adaptados a cada perfil de empleado, en un modelo LaaS -Learning as a Service- en el que formar a todos cueste al mes lo que antes costaba un curso corto para un directivo en una escuela de negocios.
Puede sonar arriesgado y audaz, pero no concebimos otra forma de transformar industrias enteras.