Un nuevo modelo de gestión para la música en directo

Por: <br><strong>César Velasco Espinosa</strong>

Por:
César Velasco Espinosa

Si los seguidores y/o interacciones en redes no están en la zona de influencia donde el artista ofrece sus conciertos, difícilmente van a ser un público objetivo para conseguir que tenga la visibilidad y repercusión necesaria, y para que dichos seguidores accedan a sus conciertos. Redactado por César Velasco desde su perfil de mypublicinbox
Por: <br><strong>César Velasco Espinosa</strong>

Por:
César Velasco Espinosa

Si el sector de la cultura, que aporta un 3,2% del PIB de la economía, sigue estando altamente precarizado, -y el de la música en directo en particular, sobre todo en cuanto a músicos emergentes-, es como consecuencia de la mala praxis de empresas privadas y públicas, al no dar de alta a los trabajadores en cada espectáculo, concierto y/o representación.

En el año 2018 se creó una subcomisión para la elaboración del «Estatuto del Artista», que se piensa pueda estar materializado a finales del año 2022.  Hasta ahora, sólo cinco de las 76 medidas previstas en este estatuto han sido desarrolladas, y una de las prioridades que reclaman en el sector es aclarar incertidumbres fiscales, como el alcance de las desgravaciones previstas para autónomos, o definir la responsabilidad en el pago de la Seguridad Social de los artistas contratados en espectáculos públicos. Para ello, la comisión interministerial tendrá que desarrollar el Real Decreto 1435 de 1985. También es fundamental establecer nuevas titulaciones para los trabajadores de espectáculos que permitan ser contratados bajo algún epígrafe concreto y determinado.

Todo el sector musical, quizá motivado por todas las circunstancias anteriores, en cuanto a cierta opacidad en la contratación y formas de pago, sigue siendo muy hermético y excesivamente condicionado por la falta de interés de todas las administraciones en adecuar unas medidas que permitan flexibilizar y dar seguridad a todos los trabajadores del sector. Es necesario eliminar burocracia, que no implique que los ingresos que pueda obtener un grupo emergente durante su actividad se diluyan en impuestos, tasas y/o asesoría para gestionar todo el papeleo necesario para realizar dicha actuación. Todo tendría que ser más rápido y dinámico, como sucede en países de nuestro entorno, véase Francia.

El futuro de la música y el uso de las nuevas tecnologías.

Es evidente que las nuevas tecnologías suponen un avance para dar a conocer nuevas bandas y músicos en el mercado, pero quizá a veces el uso excesivo y la dedicación no es directamente proporcional al resultado obtenido. 

Entender el funcionamiento de las redes sociales, actualmente sobre todo Instagram, y fundamentalmente los algoritmos utilizados es ciertamente complejo, y para que los seguidores vean una publicación, les puede suponer estar mezcladas con los diversos intereses -tanto del propio usuario como de la propia plataforma-, lo que puede implicar que un seguidor haga un scroll excesivo hasta que se muestre la publicación deseada, en el caso que el algoritmo lo considere oportuno, por lo que no siempre la publicación va a tener la visibilidad prevista.

En esa misma dinámica se sustenta el número de seguidores, que últimamente sirve como una métrica para valorar la «calidad» del músico/banda, tanto por el uso de bots -compra de seguidores ficticios-, como que no sea directamente proporcional el número de seguidores en relación a la tracción que pueda tener dicho artista. 

Si los seguidores y/o interacciones, no están en la zona de influencia donde el artista ofrece sus conciertos, difícilmente van a ser un público objetivo para determinar que tenga la visibilidad y repercusión necesaria, y dichos seguidores accedan a sus conciertos, por ejemplo.

Para intentar mejorar todas estas interacciones, hemos desarrollado Linkmusic, para tener un entorno especializado en música, donde solamente aparece la información filtrada según los intereses de los usuarios. Los usuarios -ya sean músicos/salas/promotores- pueden filtrar su información tanto por su zona de influencia -país/provincia-, así como sus géneros y estilos musicales -más de 150 referenciados-, y por sus intereses en cuanto a los músicos/bandas, salas y/o promotores/agencias de booking que sigan y publiquen sus conciertos, novedades y nuevas publicaciones en la plataforma, por lo toda la información llegará filtrada de acuerdo a los intereses del usuario.

Hemos creado un sistema de oportunidades, dentro de los packs de suscripción, que permite tanto a músicos, como salas y promotores, poder seleccionar y filtrar según sus intereses, que les llegue comunicación de forma dinámica, puedan ser seleccionados o no, todo directamente desde la plataforma en tiempo real, y una vez concretada fecha, publicar el evento en la agenda Linkmusic.

Integrando la transformación digital en el sector de la música.

Actualmente creemos que todavía no hay una integración digital en el sector de la música. 

En el ejemplo de programadores/promotores y salas, como comenta una de nuestras colaboradoras, siguen basados en el sistema «old school», funcionando a través de boca a boca, mediante llamadas de teléfono y llevando su agenda en un simple calendario, lo que les obliga muchas veces a dedicar un valioso tiempo a filtrar todo el material que les llega, definir su hoja de ruta y establecer sus programaciones de una manera compleja  que dificulta el trabajo y las interrelaciones entre músicos, salas y programadores.

En cuanto a los músicos/bandas, fundamentalmente en grupos emergentes, que, en su gran mayoría, no tienen su dedicación principal en la música, y no existe un perfil claramente definido de qué persona del grupo se ocupa de cada apartado, en relación a la gestión de sus propias redes sociales, su email de contacto o relaciones con distintos medios. Lo que en muchas ocasiones les hace perder oportunidades para conseguir conciertos, concursos o mayor visibilidad, al no contestar en un tiempo adecuado a las peticiones que les puedan surgir por parte de distintos medios.

Con el desarrollo de Linkmusic, pretendemos que el uso de nuestra plataforma sirva para agilizar y dinamizar todo el proceso, sirviendo de una herramienta útil para todas las partes implicadas, sin quitar protagonismo ni cuota de negocio a ninguna de ellas, y simplemente sirva como instrumento para dinamizar todo el sector musical.

Promoción de música y artistas en RRSS generalistas.

Tal como hablábamos en un párrafo anterior, hay un desconocimiento global de cómo funcionan las RRSS generalistas, y cómo se pude promocionar un artista desconocido para conseguir llegar a su público, darse a conocer y conseguir mayor visibilidad. En esta circunstancia, muchos usuarios solo viven de los «me gusta» de la red social usada sin tener en cuenta otros mecanismos que le pueden dar mayor visibilidad.

En nuestro caso, y por medio de la colaboración con MyPublicInbox, permite al músico generar un perfil público automáticamente para pertenecer al grupo de personajes relevantes y ser contactado por todos los usuarios que accedan a dicha plataforma, consiguiendo que su perfil tenga mayor visibilidad al estar incluido en una plataforma representativa. 

Actualmente creemos que hay una sobreinformación de todo tipo, con múltiples plataformas generalistas y demasiados canales que dispersan la atención del público y es difícil crear un criterio de selección objetivo que permita elegir lo que el consumidor en cada momento desea. En este momento, las plataformas de streaming -Spotify/Amazon/Apple/Tidal, etc.-, solo sirven para que la mayoría de los músicos se den a conocer, pero no es un sistema de monetización viable. Es conocido que músicos consagrados, con un gran número de reproducciones, el nivel de ingresos suele ser muy bajo, por lo que tienen que contar con patrocinadores, sponsors y merchandising apoyando a sus conciertos en directo. 

Los músicos emergentes pueden tener la oportunidad de ser incluidos en una playlist oficial de Spotify para aumentar el número de reproducciones, algo ciertamente complicado en un panorama con tanta oferta musical.  La nuestra es por el contrario una plataforma especializada, donde hemos integrado un algoritmo que recopila toda la información del perfil del usuario y valora su contenido, interacciones con otros usuarios, valoración y número de seguidores, publicación de conciertos en agenda y distintos parámetros para generar una puntuación global que permita escalar en la visibilidad dentro de la propia plataforma. Y hemos incluido un sistema de verificación de perfiles para crear más calidad a distintos músicos/bandas en relación a unos requisitos determinados.

Situación post Covid.

El sector musical ha sido uno de los grandes perjudicados durante la pandemia, con todas las medidas restrictivas, tanto a nivel de cierre de salas de directo, anulación de festivales, como de restricción de aforos, afectando no solamente a los músicos e intérpretes y salas, sino a todo el negocio que se mueve en dicho mercado -técnicos de sonido, luces, organizadores de eventos, agencias de booking, management, servicios auxiliares, etc. -, lo que ha supuesto que un gran número de profesionales que han tenido que reinventarse para poder sobrevivir. 

La solución de conciertos en streaming, a través de nuestra propia experiencia, para grupos emergentes, no ha tenido la acogida esperada. La inversión para generar un streaming de calidad, suele ser elevada en relación a la posibilidad de monetización con venta de entradas; es difícil encontrar un patrocinador, aunque pueda ser una inversión de futuro para el grupo al disponer de material audiovisual grabado para generar un portfolio con dicha actuación

Un concierto en directo, es mucho más que la música, donde confluye la interacción social y el contacto humano -solo hay que ver la proliferación de festivales que había hace dos años, donde casi lo menos importante eran los artistas y más todo lo que se relacionaba alrededor de ello-. 

Ciertamente, en España, no se valora en su justa medida la música en directo, lo que supone tocar un instrumento, ensayos, montajes, desplazamiento y toda la logística e intendencia que supone dicha actuación, con gran número de personas implicados.

Sigue haciéndose una extraña asociación entre música en directo, concierto y altercados o problemas con los vecinos. En relación a las salas, siempre han estado excesivamente penalizadas por todas las administraciones, ya sean locales o nacionales, en relación a requisitos, licencias y condicionantes excesivos, que limitan la posibilidad de expresión del gran número de músicos y bandas que existen en el país.

En esta circunstancia también se ha encontrado Linkmusic, hemos tenido que variar nuestro modelo de negocio original, basado en música en directo, hacia otros servicios, tales como la promoción y asistencia a bandas para mejorar su visibilidad.

En los primeros meses del año 2021 organizamos un concurso para Telefónica -Movistar Sound Atrévete-, que incluso habiendo contado con poca difusión en dicha plataforma y en un entorno complicado dentro del sistema del descodificador y bajo una living apps -desarrollada también por el equipo de Linkmusic-, se apuntaron cerca de 600 bandas/músicos, que sirvió a los 9 finalistas para grabar dos videos en directo en Estudio Uno, y al grupo ganador poder grabar un disco en el propio Estudio Uno, formar parte del sello Movistar Sound y presentar su disco en streaming a través de GoMusic, lo que supone un gran apoyo a todas las bandas emergentes para conseguir desarrollar una carrera musical.

Dependiendo de la evolución de la pandemia, con respecto a vacunación, nuevas cepas, etc. quizá marque un antes y un después en relación a lo que estábamos acostumbrados, fundamentalmente en el modelo de música en directo, sobre todo en muchos locales, que quizá no tienen una preparación adecuada para ello -situados en sótanos, locales sin ventilación con techos bajos y poca superficie que puede implicar un problema si la situación persiste-. Dicha circunstancia puede darse también en festivales con aforos masivos.

En definitiva, es fundamental un mayor uso de las tecnologías adecuadas, por todos los implicados, que permitan flexibilizar todas las acciones para dinamizar el sector musical.